Diabetes y tinta, el arte de tatuarse de manera segura.

Diabetes y tinta, el arte de tatuarse de manera segura

La idea de llevar una pieza de arte única plasmada por siempre en la piel es más que atractiva para demasiadas personas. En la actualidad el mundo del tatuaje se está dejando de relacionar con el mundo delictivo y se está tomando como un estilo de vida, una forma de representar algo importante e incluso ya es considerado como una rama más del arte.

El tatuaje consiste en inyectar tinta en la capa intermedia de la piel (la dermis), para esto se utilizan diferentes métodos, máquinas y agujas que de una u otra manera al inyectar la tinta se genera una herida superficial que dependiendo del tatuador y del tamaño del tatuaje requerirá de mucha limpieza y cuidados para evitar infecciones y perdidas de pigmento en el tatuaje. Todo esto nos lleva al siguiente punto ¿Una persona diabética puede realizarse un tatuaje de la misma manera y con la misma seguridad que una persona relativamente sana?

Para responder esta pregunta, primero hay que analizar cómo afecta la diabetes a la piel, como es la recuperación y los riesgos que se corren al tatuarse teniendo diabetes.

“La cicatrización de heridas en la diabetes mellitus resulta un proceso dinámico descontrolado como consecuencia de los elevados niveles de glucemia, el estrés oxidativo (EO) también influye en la cicatrización de heridas en la diabetes. Estos fenómenos oxidativos afectan algunas de las etapas cruciales para la regeneración de la piel dañada y a su vez, provocan que la piel sea susceptible a daños e infecciones. De hecho, se ha observado que en el tejido perilesional y central de la herida en personas con diabetes es más probable que sea propenso al EO excesivo y al daño, o lo que resulta en una curación ineficiente.”

Sabiendo esto, ahora podemos delimitar los riesgos que se corren al tatuarse siendo diabético:

• La curación del tatuaje será más lenta.
• El tatuaje puede llegar a infectarse más fácilmente.
• En el caso de infectarse el tatuaje y no tratarlo de la manera correcta, podría expandirse la infección y generar demasiado daño.

¿Debería una persona con diabetes correr el riesgo?

Es una decisión muy personal, que debería pensarse dependiendo del estado de cada persona, debido a que no hay un rango que delimite en que punto una persona con diabetes puede tatuarse o no. Pues al haber varios factores que entorpecerían el resultado final del tatuaje y los daños que este podría ocasionar, se vuelve una tarea difícil el tomar una decisión.

Pero no hay de que preocuparse ya que no existes solo una técnica de tatuaje, yo tomaría en cuenta 2 técnicas:

• Con maquina
• Handpoke

Para poder saber cuál técnica es la mejor o la menos agresiva con la piel, hay que analizar sus pro y contras

Con máquina

Existen dos tipos de máquinas, las de bobinas y las rotativas. “Las de bobina, son accionadas por la corriente mediante una fuente de alimentación con dos bobinas. Sólo las podemos utilizar para una cosa: o bien para hacer líneas, relleno o sombreado, por lo que existen diversos modelos dependiendo del uso que les vayamos a dar”.

 Estas máquinas al ser las más antiguas suelen ser muy agresivas con la piel, debido a que el martillo de la maquina se tiene que calibrar constantemente.

Las máquinas rotativas, son accionadas con un motor rotatorio. Son máquinas más precisas al no perder el tiempo en recuperar el golpe de acción ya que son de movimiento circular. Necesitan de una fuente de alimentación para su funcionamiento, estas existen en dos presentaciones la regular y el pen, la regular se ajusta de una manera similar a la de bobinas, usan un tubo y agujas de varilla, pero también se les puede adaptar un grip para que estas puedan utilizar agujas en cartucho, las maquinas pen son las más cómodas debido que como su nombre lo dice, tienen forma de lapicero y usa sus agujas en forma de cartucho.

Al usar una máquina puedes delimitar la salida de la aguja y la velocidad con la que sale, gracias al grip y al voltaje que la fuente le suministre a la máquina. Esto lo podríamos tomar como la principal ventaja además que usando una maquina se pueden realizar todo tipo de detalles.

La desventaja seria que, al ser accionadas con electricidad la aguja penetrara más veces de las necesarias, generando así una herida irritada, la cual tardara más en sanar.

Handpoke

La aguja se inserte en la piel punto por punto, por lo que el tatuador profesional que lo realiza tiene que contar con un excelente pulso y limpieza.

En esta técnica se introduce una aguja que deposita la tinta en la primera capa de la piel, sin llegar a la tercera capa, lo que significa que este método no requiere de una máquina, por lo que es cien por ciento a mano, esta técnica destruye menos los tejidos que la máquina eléctrica de tatuar, por lo que los tatuajes son menos dolorosos y cicatrizan con mayor rapidez.

La única desventaja es que el proceso es muy lento.

Ya conociendo estas dos técnicas, evidentemente el handpoke es el más indicado para una persona diabética porque al ir punto por punto la herida no sangrará ni se irritaría de más, la cicatrización del tatuaje será mas corta y por lo tanto el riesgo de infección se disminuye.

Para terminar, una persona con diabetes si se puede tatuar con cualquiera de estas dos técnicas tomando en cuenta que el tatuador cumpla con las normas sanitarias y recordando que si no tiene un buen control de su metabolismo la cicatrización será muy lenta, en estos casos podría decantarse por el método handpoke y elegir un tatuaje pequeño. En caso de tener bien controlado tu metabolismo puedes elegir el método que mas te guste, de igual manera en ambos casos el resultado del tatuaje dependerá de un 50% del tatuador y 50% del cliente pues, un buen tatuaje requiere de un buen cuidado.

Glosario

Grip: Proceso que segura que la máquina para tatuar se ajuste bien a la mano

Máquina pen: Máquina de tatuar rotativa con forma de lapicero